Tipos de sanciones laborales
Las sanciones laborales son uno de los asuntos por los que más se recurre a los abogados laboralistas. Estas se encuentran recogidas en nuestros Convenio Colectivos y pueden ser de 3 tipos: leves, menos graves y graves, siendo que pueden ir desde una simple carta de amonestación hasta la terminación del contrato de trabajo.
Para ser efectivas, deben ser proporcionadas y justificadas, además de ser interpuestas en tiempo y forma. Las empresas deben respetar también los derechos de los trabajadores y evitar cualquier forma de discriminación o abuso de poder, ya que el empleador también puede verse sancionado.
¿Cómo se pone una sanción?
El procedimiento para sancionar a un trabajador inicia por la notificación escrita al mismo de la supuesta falta o faltas cometidas. Muchas veces no se le da al trabajar la oportunidad de defenderse e impugnar la decisión de la empresa, por lo que el mismo tiene que hacerlo a través de un abogado laboralista experto en la materia.
Recuerda que, aunque es un trámite que el propio trabajador puede realizar, contar con un abogado laboralista será esencial, debes tener en cuenta que el plazo para impugnar una sanción de tu empresa es de 20 días hábiles desde que te notifican la misma por escrito. Igualmente, un abogado laboralista será capaz de observar si la carta mediante la cual te notifican la sanción adolece de algún tipo de error o vicio, siendo que de esta manera y de la mano del derecho laboral, la impugnación de la carta será mucho más efectiva.
Si tu empresa te ha sancionado por un hecho concreto o te ha hecho entrega de una carta con una serie de supuestas faltas cometidas, no dudes en contactar con un abogado laboralista para que pueda analizar tú caso. La acumulación de este tipo de sanciones puede dar lugar a un despido disciplinario y a la perdida de tu empleo y de la indemnización por todos los años de trabajo.
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